LA LLUVIA Y NORRIS, LOS PRINCIPALES ANIMADORES DEL SPRINT EN MIAMI
Decían que las carreras sprint son aburridas. Por norma general, el público suele tener razón. Sin embargo, el Gran Premio de Miami 1 de 2025 pasará a la historia por ser la excepción de la norma. Y es que cuando aparece la lluvia, la Fórmula 1 se vuelve bizarra.
Por primera vez, la Fórmula 1 presenció una tormenta típica de Florida. Quien la sufrió de manera más intensa fue Charles Leclerc. El monegasco protagonizó un “aquaplanning” masivo en su vuelta de instalación y mandó su Ferrari SF-25 directo contra el muro de hormigón.
Con un componente menos en la parrilla, 19 participantes tomaron la salida detrás del coche de seguridad. Carlos Sainz, 14º, no tenía nada que perder y jugó a ser el bufón o leyenda de la carrera al sprint: el español fue el único en comenzar con los neumáticos extremos, El resto se decantó por los intermedios.
Probablemente, Sainz habría acertado, pero la Federación Internacional de Automovilismo pospuso el espectáculo: bandera roja y todos a boxes ante la falta de visibilidad. Estas secadoras, también llamadas “Fórmula 1”, volvieron al pitlane, mientras la evaporación caribeña cumplió con su labor en el autódromo internacional de Miami. El Sprint se reanudaría 20 minutos más tarde.
Otro momento crucial para la FIA: ¿quién recuerda la acción polémica entre Oscar Piastri y Max Verstappen en el pasado Gran Premio de Arabia Saudí? Una vez más, el piloto australiano de McLaren expulsó (aparentemente) a otro adversario por el exterior de la curva 1 en una salida. Andrea Kimi Antonelli fue la nueva víctima del piloto de Melbourne, pero la Federación no sancionó, como tampoco penalizó a Verstappen por adelantarse en el cajetín de salida. También aparentemente. Aunque sí recibió una dura sanción más adelante por motivos ajenos a la salida…
Lo que iban a ser los primeros puntos de Fernando Alonso con Aston Martin en 2025, se tradujeron en un nuevo abandono por otro accidente no provocado por él. Liam Lawson, viejo enemigo, volvió a hacer de las suyas contra el bicampeón de F1. Carlos Sainz también acabó desllantado y se autoeliminó del sprint tras golpear su neumático trasero izquierdo con el muro.
Todo este caos vino precedido por la evaporación del asfalto estadounidense. Los pilotos comenzaron a montar las gomas slicks, unos antes que otros, lo que desordenó la parrilla. Max Verstappen rompió el alerón al impactar con el Mercedes de Antonelli en boxes. El neerlandés de Red Bull recibió una penalización por “unsafe release”.
Al mismo tiempo, Lando Norris aprovechó el coche de seguridad por el accidente de Fernando Alonso para ganar el duelo de los dos McLaren. Una vez más, el piloto británico venció dentro del pitlane, como en 2024.
Mucha actividad sabatina; nada mal para ser un sprint. Y todavía quedaba la clasificación principal del fin de semana con varios coches por arreglar y diversas investigaciones de por medio…