BAGNAIA PONE ARRIBA A DUCATI EN EL GP DE ESPAÑA
Francesco Bagnaia (Ducati Lenovo Team) hizo valer la ‘pole position’ conquistada en el Circuito de Jerez – Ángel Nieto para imponer un ritmo titánico este domingo en la gran carrera del GP Red Bull de España. Una estrategia que le acabó reportando su primera victoria del año, convirtiéndose en el quinto ganador distinto en lo que llevamos de 2022. ‘Pecco’ firmó una carrera perfecta para destronar a un Fabio Quartararo (Monster Energy Yamaha MotoGP™) que había dominado las últimas ediciones celebradas en Jerez. La última plaza del podio, tras una preciosa batalla a tres bandas, fue para Aleix Espargaró (Aprilia Racing), tras superar a Marc Márquez (Repsol Honda Team) y Jack Miller (Ducati Lenovo Team).
Tras lo visto en las dos primeras jornadas, todo hacía pensar que Bagnaia y Quartararo librarían un bonito duelo bajo el sol de Jerez. Al apagarse los semáforos, quedó claro que el guion iba a mantenerse. El italiano salió perfecto, seguido por ‘El Diablo’, mientras que Aleix y Márquez se tocaban y Miller se colocaba 3º por delante de Takaaki Nakagami (LCR Honda Idemitsu). La dupla de fábrica de Ducati era la cara para los de Borgo Panigale, mientras que la cruz sería Jorge Martín (Pramac Racing), al irse al suelo en la curva 13 en un incidente que involucró a Stefan Bradl (Team HRC). El Rookie del Año de 2021 regresaría a pista y culminaría la carrera, pero sin opciones de pelear por los puntos.
El paso de las primeras vueltas permitiría a Bagnaia y Quartararo abrir el preciado margen de más de un segundo sobre Miller y el resto del grupo perseguidor. Por detrás, en cambio, Alex Rins (Team Suzuki Ecstar), hasta entonces igualado al frente de la general con el actual campeón, se encontraba atascado, rodando un segundo más lento que su compañero, Joan Mir, en plena pelea con otros pilotos como Alex Márquez (LCR Honda Castrol). Situación similar a la de Maverick Viñales (Aprilia Racing), lastrado por una mala salida tras partir 12º. Cumplida la décima vuelta, Rins tendría una colada en la curva 12, situación que le haría reincorporarse 22º. Salvo milagro, la misión de obtener un buen botín de puntos se convertía en toda una quimera. En la misma vuelta, otro peso pesado como Johann Zarco redondeaba una jornada negra para el Pramac Racing al irse al suelo en la curva 5.
Con Bagnaia y Quartararo manteniendo un distancia prudencial entre ambos totalmente escapados, con casi 5 segundos de renta, buena parte de la atención de la carrera se centraba en la lucha por la última plaza de podio, entre Miller, Márquez y Aleix Espargaró. Cumplido el ecuador de la prueba, Marc comenzaría a mostrar su rueda a Miller. El ataque se intuía inminente, mientras Joan Mir seguía la estela de todos ellos a segundo y medio de distancia. Su habitual buen ritmo de carrera podía darle alas de cara a una nueva remontada, pero sus tiempos de vuelta eran prácticamente calcados.
El paso de las vueltas dejaría todo igual, con Quartararo siguiendo la estela de Bagnaia a medio segundo de distancia, sin perder su referencia, pero también sin permitir que su M1 pudiera calentarse en exceso en caso de estar demasiado encima de la GP22 de su rival. Tras ellos, en cambio, comenzaba el baile. Faltaban 5 vueltas y Márquez pasaba a Miller de forma apoteósica a su paso por la curva Sito Pons, un punto ciego solo apto para valientes. En la misma vuelta, sin embargo, Aleix daría el gran golpe en la lucha por el podio al colocarse 3º en la última curva Jorge Lorenzo. Marc tendría un susto de bulto que le llevaría a firmar una salvada marca de la casa, con su sello inconfundible, Aleix olería sangre y pasaría primero a Miller antes de consumar la maniobra pasando también a su compatriota. Un doble adelantamiento que refleja el estado de gracia del ’41’. Marc, en todo caso, crecería apoyado en esa maniobra al alcance de los elegidos.
La lucha a tres bandas por el podio permitiría a Mir reducir la brecha de forma notoria, aunque no llegaría a meterse en la batalla por completo. Centésima arriba y abajo, el margen de medio segundo entre Bagnaia y Quartararo se mantendría hasta el final, con el italiano convirtiéndose en el quinto ganador distinto del curso. Con unos preciados metros de distancia, Aleix daría a Aprilia su primer podio consecutivo en MotoGP™, mientras que Márquez firmaría otro adelantamiento apoteósico sobre Miller en la última vuelta para obtener su mejor resultado del año. El nuevo podio de Aleix conlleva que Aprilia pierda sus concesiones. Un bendito peaje que ratifica el gran momento de la fábrica de Noale.
Tras el reñido Top 5 finalizó 6º Joan Mir a tan solo un segundo de Miller, seguido también de cerca por Nakagami, mientras que el resto del Top 10 fue completado por Enea Bastianini (Gresini Racing MotoGP™), Marco Bezzecchi (Mooney VR46 Racing Team) y un Brad Binder (Red Bull KTM Factory Racing) que se impuso a Pol Espargaró (Repsol Honda Team) en el sprint final. Los últimos puntos se los repartieron el compañero de Binder, Miguel Oliveira, Alex Márquez, Viñales y Franco Morbidelli (Monster Energy Yamaha MotoGP™). Rins y Martín, pese a buscar el milagro, acabarían 19º y 22º, respectivamente. Con estos resultados, Quartararo es más líder con 89 puntos, tan solo 7 más que Aleix (82), mientras que Bastianini y Rins igualan con 69 puntos, a 20 del liderato. Bagnaia (56) es el encargado de cerrar el Top 5 igualado con Mir. ¡Un escenario muy abierto antes de visitar Le Mans!